Descripción
CARROCERÍA & LACQUER:
El lacado de este Alfa Romeo 2000 GTV Bertone se presenta muy bonito y brilla con riqueza. Solo se aprecian un par de pequeñas manchas, pero casi no llaman la atención y no restan al aspecto general. El acabado cromado original alrededor de los listones de las ventanillas y detalles decorativos está cuidado y las gomas se encuentran en buena condición.
En su día este GTV estuvo equipado con un techo corredizo; si se observa con atención, se puede apreciar una ligera contouración en el techo. Esto no resta la impresión sólida que emana la carrocería. No se requiere trabajo directo en la pintura o en la parte exterior del coche. La parte inferior presenta un aspecto duro y está bien tratada con tectyl.
Por momentos se ve algo de óxido superficial, pero no de magnitud grave ni de mantenimiento inmediato.
Como corresponde a un clásico italiano, la tecnología bajo la chapa deja algunas señales aquí y allá: hay una gota o una nespita evidente. Lo que llama la atención es que las puertas no cuelgan del todo bien; la del derecha exige algo más de atención que la del izquierda. En la canaleta de agua junto al techo se aprecia un poco de pulverización de pintura.
Por último, hay una lista detallada de piezas sustituidas, que puede encontrarse en la fotoreportaje.
TÉCNICO:
El Alfa Romeo 2000 GTV Bertone arranca con facilidad y, de inmediato, ofrece el característico sonido pleno por el que estas motorizaciones son conocidas. El embrague y la caja de cambios funcionan correctamente; los cambios son suaves y precisos. Las luces y los intermitentes funcionan como deben. Solo el cuentarrevoluciones a veces tarda unos instantes en activarse, aunque suele funcionar también desde el encendido.
Al conducir, el coche toma vida por completo. A medida que el motor se calienta, suena aún más rico y envolvente, exactamente como debe ser un clásico italiano. El motor, la caja de cambios, la línea de transmisión y los frenos se encuentran en buena condición y no requieren atención inmediata.
El coche ha sido mantenido y vigilado por nuestra empresa automotriz en los últimos años. Se ha utilizado regularmente, por lo que no ha estado inactivo durante largos periodos. Así, se trata de un auténtico coche de conducción, listo para muchos kilómetros placenteros.
También se han renovado muchos componentes a nivel técnico; encontrará la lista detallada en la fotoreportaje.
INTERIOR:
El interior de este Alfa Romeo 2000 GTV Bertone es en su mayor parte original y transmite el ambiente auténtico de los años setenta. Se aprecian algunas señales de uso que encajan con la edad del coche: la tapicería de la consola de cambios presenta algunos daños y el material plástico del indicador de combustible está ligeramente afectado. No obstante, no resulta molesto y no resta al conjunto.
La moqueta y las paneles de las puertas se encuentran en buen estado. El tablero de instrumentos también es pulcro y sin grietas ni daños importantes. En las molduras de las ventanillas se aprecian óxidos superficiales, pero son limitados y no influyen de forma directa en la experiencia de uso.
En resumen: un interior cuidado y Original que subraya el carácter de este clásico, con una leve pátina que contribuye al encanto de un coche que se puede disfrutar al volante.
DOCUMENTOS:
Junto al coche se encuentran los certificados de registro habituales, así como una lista detallada de piezas sustituidas. No hay más documentación o papeles disponibles.
El proceso de restauración está parcialmente documentado; hay fotos disponibles en la fotoreportaje. El mantenimiento, las inspecciones y la historia de los últimos años han sido gestionados internamente y llevados por el propio propietario, que trabaja en el sector automotriz.
El coche puede ser visto con cita en Alkmaar. Para ello puede ponerse en contacto en cualquier momento con Richard van Lieshout a través de using the button below o the details below. Suba y descubra por qué el Alfa Romeo 2000 GTV Bertone se considera uno de los iconos de la historia automotriz italiana. Este elegante coupé, diseñado por Bertone, combina estilo y deportividad en una forma compacta y musculosa. Bajo el capó, la vivaz biela doble de cuatro tiempos ofrece un rugido áspero que convierte cada viaje en una experiencia.
Este no es un coche que pase desapercibido. Dondequiera que aparezca, la GTV despierta admiración: una sonrisa, un pulgar hacia arriba o simplemente admiración silenciosa. Es llamativo sin ser ostentoso: elegante, con encanto y con temperamento.
Gracias a su maniobrabilidad y sensación de conducción directa, el 2000 GTV ofrece puro placer de conducción. Las curvas se vuelven una danza, la aceleración, una fiesta. Un clásico que hace más que lucir en el garaje: es un coche que se disfruta una y otra vez.
El coche puede ser visto con cita en Alkmaar. Para ello puede ponerse en contacto en cualquier momento con Richard van Lieshout a través de using the button below o the details below.











